martes, 29 de noviembre de 2022

FELICIDAD Y LIBERTAD

   FELICIDAD Y LIBERTAD  .

El hombre tiene necesidad de contar con un, llamémosle hilo conductor, o idea de lo que como persona es, así es como la vida NO nos resulta un absurdo. Si esta idea consiste en pasarla bien o sea buscar solo la felicidad terrena, el tener cosas y situaciones que producen contento, bienestar, distracción, lo que pretendemos es el hedonismo, que podemos calificar como la búsqueda del placer por el placer, generalmente de plazo corto, pero en seguida, de inmediato, ya. Son los jóvenes que aún no tienen suficiente experiencia de vida los que pueden caer en los engaños, de lo que se anuncia para vender múltiples artículos y servicios. Una de las características del hedonismo es que quienes lo persiguen se encuentran que no pueden saciar sus pretensiones, siempre hay algo más tecnificado, más cómodo, más rápido, más a la moda, más algo, y la vida al no tener más que algo que no satisface por completo, resulta finalmente un absurdo. Por el contrario quien ha puesto como finalidad de su vida, el ingrediente espiritual, aparte de las finalidades terrenas, y este ingrediente es la salvación de su alma tiene a esta vida, lejos de que le resulte un absurdo, algo digno de ser vivida, algo útil que a su término le proporcionará la felicidad perfectísima y eterna de la visión beatífica. Y por lo tanto se vive plena de sentido y de la verdadera felicidad.

Los padres de familia que han tenido la suerte de haber recibido una buena educación cristiana, encuentran gran felicidad al comprobar que sus hijos tienen la fe de sus abuelos, pues ellos han sido el ingrediente intermedio. Mientras podemos comprobar que personas inteligentes están ciegos a la fe, y esto es parte de lo que ha motivado la espantosa realidad de nuestro tiempo, que ha progresado en lo tecnológico, en lo económico, pero no en lo integral del ser humano, pues se han venido perdiendo los valore tradicionales cristianos.

El materialismo que vive quien no practica, tiene,  o conoce los valores tradicionales lo que tiene  es en realidad un vacío que se rellena con mitos sobre el obtener la felicidad, suponen que en su “libertad” les permite esa búsqueda, ignorando que la felicidad no se puede comprar, que es algo interno, íntimo, que no viene de fuera, que se tiene dentro de sí. Por el contrario aquel que vive los valores tiene siempre la seguridad de que le llevarán a la trascendencia a la otra Vida. Esta clase vida les parece a los materialistas como algo aburrido, no libre, siendo la verdad que por el contrario es una vida rica en finalidades que se relacionen con el más alto de los fines, el fin final consistente en  nuestra salvación. El vivir practicando por convencimiento propio una vida con la finalidad mencionada, es vivir libremente en búsqueda y práctica de la verdadera felicidad, es el tener señorío sobre las cosas, sin pretender que nos dominen pues al despreciar lo superfluo ello nos proporciona felicidad, la satisfacción que el buen cristiano siente.  Lo importante en el caso de quien valora la vida terrenal como camino hacia la santidad, y es que esta búsqueda le da savia a su existencia, le proporciona una valía, un temple que la colma de plenitud, y lo hace en uso de su libertad, es vida rica, valiosa, que al perseguir sus ideales y fines intermedios, se enfoca al fin último, y valiosísimo, por encima de todo.

Y ¿Qué viene a ser esta manera de llevar a cabo nuestra existencia?  Sino amor a Dios, y a los demás, en el que vivimos con mayor o menor intensidad las tres Virtudes Teologales, la Fe que está en la base de nuestro actuar, por eso se explica solo, la Esperanza radica en el enorme premio que Dios nos tiene reservado y que queremos obtener,  y la Caridad, como antes dije, por el amor a Dios y a sus criaturas, que nos lo da todo, incluyendo la vida de su Hijo, Nuestro Señor Jesucristo, cuya pasión redentora, vida, doctrina, ejemplo, enseñanzas nos ha heredado, los multi-mencionados valores tradicionales de verdad, amor, justicia, paz y los que se les relacionan, como la institución familiar, la educación integral, el servicio y amor a nuestros prójimos, y un largo etcétera.

Esta actitud ante la vida nos proporciona una felicidad auténtica que libremente realizamos ante las diferentes situaciones personales que nos toca sufrir o gozar, parece un contra-sentido el que en la enfermedad y los sufrimientos se conserve la felicidad, aquí lo que conviene es establecer que se puede sufrir sin perder la felicidad, no es necesario tener una excelente salud para ser feliz y si se puede ser un infeliz carente de valores con buena salud. El buen cristiano en las penurias no pierde la felicidad, y ello inclusive le proporciona más elementos para mejorar que el infeliz, porque en medio de las dichas penurias por diferentes causas, enfermedad,  pobreza, injusticia,  se viven los valores. En las situaciones adversas los que conserven sus valores viviéndolos incluso más intensamente, al perfeccionar así su existencia, con necesidades en ocasiones insatisfechas por necesidad invencible, agradan más a Dios, que en la perfección de su justicia los tomará en cuenta en su momento.

El mundo actual, y esto es una generalidad para solo un porcentaje de su población ha cometido y ello va creciendo por desgracia, errores gravísimos que se relacionan con la infructuosa búsqueda de la que consideran su felicidad,  que encontramos:  en el permisivismo, en el consumismo, en el divorcio, en el aborto, en el suicidio asistido de los mayores o casos de minusvalía, en el reconocimiento religioso y legal del homosexualismo, considerados en muchos casos como soluciones que proporcionan felicidad, aquí dejo las dudas a cada quien. La Real academia define a la felicidad como: estado de grata satisfacción espiritual y física.

El estado físico, si bien no quita la felicidad cuando no es grato, cuando se está enfermo o incapacitado, tenemos que considerar que hay casos en que queda impedida por la propia enfermedad o los dolores insoportables, la actividad espiritual, al que está muriendo de hambre y su estado es de tal magnitud que le impide incluso el razonar, es difícil que logre un estado de espiritualidad normal, ya no digamos profundo. En los casos de enfermedades que causan  dolor la Iglesia no solo permite sino recomienda los paliativos del dolor, en bien de la persona sufriente y de sus cercanos, lo que reporta mucha mejor actividad espiritual.

Hay otras situaciones que aumentan nuestra felicidad, un caso puede ser el de las personas que culminan el logro de un objetivo que les ha costado mucho el obtenerlo, es grato a la auto-estima, en especial si conlleva la espiritualidad, por ello es que en multitud de ocasiones se ha dicho y se dice y dirá, porque es una gran verdad que las personas más felices son las que se han entregado por completo a Dios libremente en el servicio, en la oración por los demás, como es el caso de monjes, monjas, sacerdotes y de  laicos como la Prelatura del Opus Dei, aquí quisiera resaltar que en medio del mundo, y fuera del mundo esa perfectísima felicidad de la entrega al servicio de la Iglesia,  en sus diferentes roles que es ponerse a las más altas expectativas que nuestra libertad nos otorga en el apostolado, que es lo más agradable a Dios. Él así lo espera pues nos creó a imagen y semejanza suya, dándonos un alma espiritual y eterna y quiere que todos los  hombres se salven, haciendo uso de su libertad. Algunos teólogos insisten en que ello nos hace corredentores con Jesucristo.

Pidamos a María Santísima, corredentora, que nos apoye como hijos queridísimos que somos de ella, para que nuestra entrega sea mejor día a día.

JCS.

jueves, 10 de noviembre de 2022

MEDITACIONES SOBRE LA IGLESIA CATÓLICA

  MEDITACIÓN SOBRE FASCETAS DE LA IGLESIA CATÓLICA.

1.- ¿Qué es la Iglesia? LA IGLESIA, NUEVE CLAVES PARA ENTENDERLA MEJOR.

1.       ¿QUE ES LA IGLESIA?  En el lenguaje cristiano significa: asamblea litúrgica, comunidad local de creyentes, comunidad universal de los mismos, por vivir de la Palabra y Cuerpo de Jesucristo viene a ser Cuerpo de Cristo.  Llamamos Iglesia también a los templos católicos.

SAN JOSEMARÍA NOS RECUERDA: Lo más importante en la Iglesia no es ver como respondemos los hombres, sino ver lo que hace Dios. La Iglesia es eso: Cristo presente entre nosotros. Es Dios que viene a salvarnos, nos llama con su Revelación, nos proporciona su Gracia, nos ayuda en todos los detalles de nuestras vidas.

 

2.       PORQUE NACIÓ LA IGLESIA. Una vez creados, y después de la caída de nuestros primeros padres Adán y Eva, Dios nos promete un salvador. Nos llama a participar de la vida divina y lo hace a través de su Hijo Jesucristo. Nos convoca en la Santa Iglesia a los creyentes, la que se va formando a lo largo de la historia humana, y ha sido prefigurada ya desde el origen del mundo y preparada maravillosamente en el pueblo de Israel con la Antigua Alianza, y poco después de la Ascensión de Jesucristo  se manifiesta en Pentecostés la gloriosa llegada del Espíritu del Señor, y permanecerá inspirándola, cuidándola hasta  la plenitud del final de los tiempos.

SAN JOSEMARÍA NOS RECUERDA:  Lo que San Agustín nos legó: ..amemos a su Iglesia, a Él como Padre y a ella como Madre, y a san Cipriano quien declaró: ..-no puede tener a Dios como Padre, quien no tiene a la Iglesia como Madre..-  La Iglesia no es un precario proyecto del hombre, sino un designio de Dios, la Redención y salvación del mundo son obra de la amorosa y filial fidelidad de Jesucristo y de nosotros con Él, fue la voluntad de Dios que nos lo envió. La Iglesia es de Dios y pretende un solo fin: la salvación de las almas. Acerquémonos al Señor, orémosle, pidamos perdón por nuestra miserias personales, y reparemos por los de los demás hombres, los actos de desagravio son parte importante de nuestra devoción, que muchos no saben lo que están haciendo. Esto es parte de nuestro amor a la Iglesia.

3.       ¿QUIEN FUNDÓ LA IGLESIA?  Al corresponder a Jesucristo realizar el plan de Salvación de su Padre, comienza su misión, y así su Iglesia, al anunciar la llegada del Reino de Dios, el anuncio de la Buena Noticia, este reino prometido en las Escrituras desde hacía siglos, estaba presente ya en misterio, Jesucristo inaugura el Reino de Dios aquí en la tierra, lo manifiesta con palabras, obras y su propia presencia. Acoger su palabra es acoger su Reino, pero la Iglesia  ha tenido varios puntos que se pueden considerar fundacionales, el primero cuando a Pedro, (Mateo 16, 18). La venida del Espíritu Santo en Pentecostés, promesa que cumple a los diez días de su Ascención a los Cielos,  por el don total de Cristo por nuestra salvación, lo anticipa en la institución de la Eucaristía, lo realiza en la Santa Cruz, y como signo de este comienzo y su crecimiento brotan del costado de Jesús crucificado agua y sangre.

 

SAN JOSEMARIA NOS RECUERDA: 

Que Jesucristo ha dado a su Iglesia la seguridad de su doctrina, la corriente de Gracia de sus sacramentos, y ha dispuesto de personas para que  orienten y recuerden  el camino.

 

4.-COMO CONTINÚA LA MISIÓN DE JESUCRISTO A LO LARGO DE LA HISTORIA. Desde que inicia sus fundamentos le da Cristo a la Iglesia una estructura que permanecerá hasta el fin de los tiempos. La empezó con su primer Magisterio, los doce apóstoles con Pedro a la cabeza. Son representantes de las doce tribus de Israel y cimientos de la nueva Jerusalén.

Estos apóstoles nos muestran la misión de perpetuarse que Jesucristo les encomendó, y se preocuparon de dejar sucesores bien formados y que mantuvieran la estructura a través de la que se busca la salvación de los hombres, que se va edificando y sosteniendo con Cristo y el Espíritu Santo. Se trata del primer Magisterio de la Iglesia, que nos transmite la Divina Revelación en los Evangelios, Libro de los Hechos, escritos de San Pablo, y Cartas de los Apóstoles. Fin Primera parte.

 

SAN JOSEMARÍA NOS RECUERDA.- que hay muchos cristianos aturdidos y desorientados que piensan que la Iglesia ha sido superada y que lo que el Magisterio nos ha enseñado por siglos debe ser sustituido por algo:  ¡nuevo!.  La Iglesia de Jesucristo  fundamentada en la Fe y en los Sacramentos, es hoy la misma y no puede ser otra. Las cuatro notas de la Iglesia: UNA, SANTA , CATÓLICA Y APOSTÓLICA, son permanentes, inviolables, únicas, esenciales, y derivan de lo que su fundador quiso, y todos los CRISTIANOS debemos de amar. 

JCS.

tercera parte: CALAMIDADES PROCEDENTES DE ERRORES HUMANOS

 





 
Para: jorgecasasysanchez@gmail.com

     CALAMIDADES PROCEDENTES DE ERRORES HUMANOS. Tercera parte.

En la ENTRADA anterior tratamos preferentemente los problemas del Camino Sinodal alemán  que trata de democratizar a la Iglesia con criterios sociopolíticos lo que está muy mal, pues la religión cristiana, su doctrina, sus valores y todas sus demás, facetas provienen de la Divina Revelación de Jesucristo y todo buen cristiano y en toda la jerarquía se debe de conservar, vivir, obedecer, respetar en su totalidad absoluta y nada más,  en especial el problema HOMO, cuyo origen en la mentalidad de los afectados no ha encontrado las respuestas completas en lo psicológico. El tener dicha orientación no es pecado, si es un desorden contrario a la ley natural, (Dios Creador tiene sus razones para permitir que suceda, como tienen lugar sucesos que afectan y cuestan muchas vidas, como los terremotos, maremotos, inundaciones, etc.,  cosa que los humanos no alcanzamos a comprender), la Iglesia y con ella los católicos, les debemos  tener compasión y tratarlos en relación a su desviación con delicadeza, especialmente dentro de las familias, no cometiendo la injusticia de discriminarlos. La esperanza de que superen sus problemas debe ser motivo de oración, consejo, apoyo, comprensión, paciencia, y en su caso ayuda profesional, en la confianza de que lo superen. El gran peligro consiste en su admisión, pretendiendo que sea natural lo antinatural, sencillamente la humanidad tiene que seguir  como hasta hace pocos años viviendo con esta clase de problemas que y que no tenemos respuesta a ello, lo que se debe de cuidar es que no se abran fisuras legales que dejen camino a otros problemas que ya se ven venir y son aún más peligrosos, como el admitir  lo que de momento en muchas legislaciones son delitos, pero que se pretende modificar ésta para admitir como legales, por ejemplo: la sodomía, el estupro que consiste en engaño de menor para que se someta a abuso sexual, la pedofilia o pederastia que es la atracción sexual antinatural que sienten adultos hacia los pequeños de ambos sexos, los  abusadores   “grooming” o ciberacoso,   que es el delito de acosar sexualmente a menor o adolecente por un medio digital. Es penoso pero hasta allí alcanza la perversión contra menores, aparte de otros grandes males como pornografía que les son accesibles a las redes sociales, con el beneplácito de las autoridades. Y muchos más. Debemos como padres  antes que nada y ciudadanos responsables mostrar nuestra inconformidad y hacer lo que en cada caso corresponda por detener el permisivismo, cambiando las leyes y su espíritu de protección a los seres humanos, los menores especialmente. No podemos dejar de pensar en el escándalo que ha sacudido a la Iglesia, aunque el lastimoso problema ha sido magnificado por sus perennes enemigos incluida parte de la prensa, que  ha dado gran regodeo a los casos dando  un revuelo exagerado que ha contribuido perversamente a la magnificación del asunto.  Y del que se siguen mentirosamente haciendo falsas acusaciones.

 

LAS GUERRAS, estas causan las mayores calamidades, al género humano, y sobre ellas conviene que conozcamos que lo que la Iglesia, maestra nuestra, nos predica; antes que nada es la paz lo verdaderamente humanístico, el trato al prójimo como a nosotros mismos, sin hacerle lo que no nos gustaría que nos hicieran, siendo el mandamiento del amor al prójimo Juan 13, 35-35, lo que debe de prevalecer y estar sobre toda consideración, como señal y guía,  pero se dan casos en que solo la defensa con armas por su muy especial génesis hace que una guerra sea legítima y las consideraciones que hay que tomar son: en primer término si los objetivos que se buscan avalan el enfrentamiento, si la problemática causal puede tener la solución pretendida, y considerando el espíritu de las escrituras y los derechos del hombre así como la ausencia de ambiciones desmedidas de dominio territorial, señorío en los mercados, y otras consideraciones ilícitas como: los celos políticos, las envidias por el bienestar, los odios ancestrales de religión, raza, cultura, etnia. En las guerras se sojuzga, se mata, se realiza pillaje, con consecuencias desastrosas para el pacífico, el inocente que solo se ocupa de la búsqueda de la felicidad propia y la de sus familiares así como de la libertad de todos y la ha venido construyendo por mucho tiempo con  su familia y de pronto todo se ve destruido y amenazados  sus más cercanos familiares,  su patrimonio, cultura, tradiciones, religión, etc. quien comienza una guerra debe de tener presente que el prójimo espera de nosotros que se le trate como nos gustaría ser tratados, con respetos a nuestras costumbres, con amistad, con amabilidad exenta de odios, sentir verdadera pena y empatía sobre los sufrimientos de los demás. No debemos olvidar el altísimo costo que las guerras tienen en vidas humanas, la mayor parte inocentes y ajenas a la problemática que las genera. El expansionismo de hoy no solo trata de conquistar territorios más allá de sus fronteras, sino el crecimiento de su dominio en los mercados. Ahora mismo esto lo estamos constatando en la terrible invasión de Ucrania perpetrada salvajemente por el mandatario ruso Putin, en su monstruoso afán de protagonismo, que junto con Stalin, su actuación pasará al basurero de la historia como un GENOCIDIO más, en contra de una nación libre, vecina,  que buscando el cobijo de la OTAN, pues en su triste historia ya contaba con la pérdida de la península de Crimea a manos del Ex Imperio ruso cuyas intenciones expansionistas son claramente repudiadas por todo ser humano consiente.

La consideración primera que es  gran calamidad, es la enorme injusticia que causa pérdida de vidas, la destrucción generalizada de edificios, puentes, caminos, campos de cultivo y su infraestructura, etc. en lo material. Aparte de los bienes culturales y espirituales que también son atacados. Examinemos ahora el aspecto de la moderna esclavitud. La posesión de las personas y lo verdaderamente importante, su trabajo en tanto fue valor económico, que era lo que se pretendía en el viejo y superado esclavismo, ha sido sustituido por una nueva manera de apropiarse del producto económico del trabajo de las personas, (guerra fría) hay quienes lo califican como una forma moderna de esclavismo porque el valor del trabajo, traducido en consumo y consumismo es valor económico. Y nos referimos al consumo de lo necesario, incluido el ocio, el descanso vacacional, y no se diga del consumismo de lo superfluodel atractivo de las modas, del afán de lujos, el ilegítimo deseo de mejora en las condiciones de vida e incluso lo despreciable “del tener por el tener”.  Es por supuesto natural, legítimo, necesario y conveniente el deseo de progreso, con el orden debido, esta es condición indispensable. Son las grandes empresas, que de alguna manera representan los intereses de sus países de origen, y a las que viene a dar la mayor parte de las utilidades obtenidas en los otros países. Esto al ser una enorme interconexión de inversiones de los grandes capitales, que al ir colmando sus propios mercados nacionales, buscan los sitios de inversión atractivos  en su expansión, esto entre las naciones si pierde  su equilibrio afecta a toda la  economía mundial, y cuando pierde la armonía que ha venido creando, como claramente  lo está sufriendo todo el globo ahora mismo, con los desajustes provocados por la invasión de Ucrania, a  muchas economías se les causan grandes pérdidas, con los pobres como primeras víctimas.

El planteamiento importante radica en que la GLORIA HUMANA, está en la paz, en la obtención de derechos, poderes, bienestar generalizado, que es lo loable humano, sustentados en trabajo e iniciativas inteligentes, pacíficas, y no en lo sanguinario y vergonzante. Eh ahí el progreso y desarrollo que producen nuestro bienestar, recordemos que el hombre ha sido creado para trabajar para progresar usando, pero cuidando la naturaleza, procurando no contaminarla, afectarla irremediablemente. Es de notarse que en una sola  frase, pero de una profundidad insondable nos de la solución, tan solo deberíamos aplicarla, lo que por desgracia no sucede, no me cansaré de repetirlo, las grandes soluciones que nuestro mundo ha necesitado, necesita y necesitará hasta el fin de los tiempos están radicadas en el NUEVO MANDAMIENTO DE JESUCRISTO:…. AMAOS LOS UNOS A LOS OTROS…. La vida de los hombres y las naciones en sus afanes de enriquecimiento y dominio de los mercados  en donde mejor deberían de competir es en las ALTAS TECNOLOGÍAS de la alimentación, vivienda, alimentación, transporte, fabricación de los miles de artículos necesarios y convenientes,  no contaminantes, y en los otros campos humanos relacionados al progreso de las naciones, sin olvidar a las más pobres, es más teniéndolos como principalobjetivo. Termino esta ENTRADA recordando que todo progreso y desarrollo humano, en lo tecnológico, en lo  económico y en lo social debe de ser acompañado de DESARROLLO ESPIRITUAL, para ser integral, pidamos porque esto sea así.

Jorge Casas.

Segunda parte CALAMIDADES PROCEDENTES DE ERRORES HUMANOS

 


Segunda parte,  CALAMIDADES PROCEDENTES DE ERRORE HUMANOS.

En la primera parte vimos el gran problema del aborto, calamidad humana que la historia calificará como el delito multitudinario que a partir del siglo XX, la humanidad comenzó a realizar, y cuyo término no conocemos. Se nos echará en cara, como generaciones, que convertimos en nuestras legislaciones, a un crimen en un derecho, tratando de dar respuesta a demandas poblacionales que se auto califican como democráticas, como si la moral humana (y cristiana) fuera cuestión de voto popular, a ver como se requiere, “democráticamente”. Como de costumbre el abrir puertas que moralmente deben permanecer cerradas, producirá horribles consecuencias a la humanidad, solo por mencionar dos, detrás de la legislación permisiva del aborto vendrán la del suicidio asistido y la Eutanasia, y después otras inconfesables también.

También se comentó algo de las guerras, que son siempre fratricidas, pues somos una sola familia, la familia humana, como nos enseña San Josemaría, ahora vamos a tratar un problema que si bien es mundial, en forma muy directa afecta a la Doctrina Cristiana, y a la cristiandad, porque una parte sensible de nuestra Iglesia, especialmente en los Países Bajos y en Alemania ha encontrado adeptos, que necesitan de nuestras oraciones para comprender mejor nuestra fe, nuestra Doctrina que es legado directo de Dios Padre a través de la segunda Persona de la Santísima Trinidad, Nuestro Señor Jesucristo, no puede ser página enmendable. Nuestro Magisterio ha analizado profundamente estos temas y los que vamos a tratar y nos los ha definido y enseñado con claridad diáfana. Lo que los Papas aceptan, respetan, difunden, por ser eso precisamente, Magisterio.

Se trata del problema que se relaciona íntimamente con la sexualidad humana y con la adquisición de costumbres perversas, que por desgracia va tomando fuerza nueva todos los días, y por lo tanto debe ser seriamente considerada por los católicos, no solo como un problema mundial, sino también doctrinal. Creo que la primera y más importante consideración que debemos de plantearnos es lo concerniente a la REVELACIÓN DE NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO Y SU RELACIÓN CON LA ACCIÓN DEL ESPÍRITU SANTO. Una de las calamidades consiste en la aceptación por legislaturas y sociedades de situaciones que más adelante veremos.

Juan en el capítulo 14, versículos 15-18 de su Evangelio claramente nos pasa estas palabras de Jesucristo. “…si me amáis guardareis mis mandamientos y yo rogaré al Padre y os dará otro paráclito para que esté con vosotros SIEMPRE, el Espíritu de la verdad, al que el mundo no puede recibir    porque no le ve ni le conoce; vosotros le conoceréis porque permanece a vuestro lado y está en vosotros”…. Aclarado este punto lo absolutamente necesario del catolicismo es que pongamos en práctica las enseñanzas que la Iglesia nos proporciona a través de su Magisterio. Lo contrario sería desconocer la acción del E.S.”. Y considero conveniente empezar con el planteamiento del problema.

Los homosexuales activistas en general son anti-católicos y culpan a la sociedad mexicana por supuestas actividades que ellos llaman “negativas” , mientras que en países tolerantes  como Holanda y Nueva Zelanda, los problemas son similares y situaciones relacionas son similares. Conviene que hagamos ciertas aclaraciones antes de continuar. Existe entre los humanos lo que se denomina ORIENTACIÓN HOMO, existe la homosexualidad, que no pasa de ser orientación homo, y existe el homosexualismo u homosexualidad, que se refiere no solo a la orientación sino a la práctica de la sexualidad con otra persona del mismo sexo. Hago esta aclaración porque si una persona católica sufre de orientación homo, pero se reserva su situación y no practica la homosexualidad, se abstiene, por considerar que es antinatura su padecimiento, o irregularidad y es que es casta y pura, es tan digna de encomio como aquella que, teniendo orientación normal, ha ofrecido su castidad y pureza por razones de otra índole.

Menciono lo anterior porque si los padres notan una orientación homo o alguna otra irregularidad en este campo de la sexualidad de sus hijos,  es posible que estén muy a tiempo de corregirla con el tratamiento adecuado. Esto además nos confirma que los padres deben de proporcionar a sus hijos la educación de la sexualidad, y para ello es necesario que tengan los conocimientos adecuados, es por tanto responsabilidad materno-paterna el estar bien documentados de cómo llevarla a cabo. La lejanía de la Iglesia, el autoritarismo, el cónyuge abusador, son problemas que pueden afectar la orientación sexual de sus hijos, por lo que esto apoya la tesis de que nadie está mejor preparado que el propio hogar como escuela de todas las virtudes y valores, frente al peligro de dejar, como se ha venido haciendo hasta el siglo XX la cuestión sexual, por considerarla equivocadamente como tema tabú entre padres e hijos. Malo, se dirá y con razón que la educación de los padres es necesaria para poder ser a su vez ser educadores, ello es  absolutamente cierto pero ese es otro problema que en otra ocasión trataremos. Pésimo es que el gobierno a través de la SEP se abrogue esta enseñanza, peligrosísimo por la cantidad de errores y aberraciones que se darían. LA EDUCACIÓN DE LA SEXUALIDAD ES TARÉA IMPORTANTÍSIMA DEL HOGAR. Para muestra de las gravísimas equivocaciones que cometen los gobiernos al aceptar, cediendo a presiones económicas,  la Ideología de Género, que es ya, increíble, enseñada en los centros escolares oficiales.

Muy lamentable es lo que dentro de nuestra Iglesia está sucediendo, son varias las diferentes situaciones, pero solo veremos esquemáticamente una, la que corresponde a la llamada “Camino Sinodal”. La cual apoya varias reformas que van en contra de la Doctrina de Jesucristo, la que con la inspiración del Espíritu Santo nos interpreta el Magisterio de la Iglesia. Son las siguientes cinco como principales, y en ellas está incluido el tema que nos ocupa:

 

.—La ordenación de mujeres sacerdotisas debería de ser aprobada.

.—El laicado  debería de tener más influencia sobre las decisiones episcopales.

.--LAS UNIONES HOMOSEXUALES DEBERÍAN TENER BENDICIÓN DE UNIONES DE MISMO SEXO.

.--El Catecismo de la Iglesia Católica debería ser reformado en temas de moral sexual, los actos sexuales homosexuales entre uniones/parejas del mismo sexo deben aceptarse teológicamente y no ser considerados un comportamiento pecaminoso.

.—El matrimonio para los sacerdotes debería ser aprobado.

 

Como vemos esto es tratar de enmendarle la página a Nuestro Señor Jesucristo, cuyas enseñanzas son indicadas directamente por Dios Padre, y al Espíritu Santo al guiar a la Iglesia de Jesucristo. Penosamente dentro de nuestra Iglesia hay cuestiones cismáticas, que de vez en cuando se presentan,  como en este caso, en especial en países europeos, como Alemania y Holanda. Es importante tema de oración por nuestra parte para que estas secciones de nuestra Iglesia cambien su actitud y corrijan sus pretensiones, pues van en contra de la auténtica Doctrina Cristiana. Hay movimientos financiados particularmente por enemigos del catolicismo como Open Society de George Soros que apoyan la Ideología de Género, o los movimientos como LGTB (siglas de las palabras: lesbianas, gais, bisexuales y transgénero), que son en general activistas anti-católicos, que esgrimen argumentos que no tienen ningún soporte científico serio para tratar de que sus desviaciones sean social y legalmente aceptadas como normales. La Iglesia Católica no está en contra de esas personas, lo está en contra de las ilícitas relaciones sexuales que llevan a cabo. La Iglesia no está contra, sino a favor del pecador, pero no lo está ni estará nunca a favor del pecado. Es por estas razones y por las posibilidades de que la desinformación vaya dando cabida a las desviaciones sexuales y no solo las permita sino que las legalice, y lo peor las fomente.

El tema es mucho muy amplio, pero sus fundamentos son los mencionados, a los católicos nos corresponde aportar las soluciones en su caso y rogar a Dios y a nuestra Santísima Madre del cielo la Virgen María, para que la humanidad pueda salir purificada de este flagelo.

Jorge Casas.