lunes, 28 de febrero de 2022

LA LIBERTAD

 

-LA LIBERTAD.-

ACTOS DEL HOMBRE Y ACTOS HUMANOS.- Vamos a ver en varias dimensiones a la libertad. Libertad y moralidad ya que los actos humanos son libres. (los del hombre no están sujetos moralmente) también la veremos como responsabilidad. Y su relación con nuestra salvación. A la libertad se le debe de considerar como facultad de la voluntad, que tiene como contrarios el equivocado determinismo. (Calvino, Lutero),

 

----LA LIBERTAD.- la goza la persona humana, no los animales. Así hablamos de libertad de expresión, de reunión, psicológica (Sancho Panza-gitano).

----CATECISMO: el poder radicado en la razón y en la voluntad de obrar o no obrar, de hacer esto o aquello, de ejecutar por si mismo acciones deliberadas.

----SAN JOSEMARÍA: nos lo transmite en forma de pregunta que le hace a Dios. ¿Por qué me has dejado, Señor este privilegio con el que soy capaz de seguir tus pasos, pero también de ofenderte?. Lo que nos lleva a calibrar el recto uso de la libertad, si se dispone hacia el bien, o equivoca su buena orientación y nos encamina al mal----El buen uso es cuando, en ejercicio de nuestra libertad le decimos al SEÑOR, dime lo que quieres de mí, y libremente hago todo lo posible por realizarlo, con tu ayuda, porque solo no soy nada, pero con tu ayuda, podré. Podemos recordar—LA VERDAD OS HARÁ LIBRES—mientras que la ignorancia nos esclaviza. Esto lo podemos decir así, la libertad se da en la medida que actuamos el bien, y esclaviza con el pecado.

----La libertad nos hace responsables de nuestros buenos actos, en la medida que estos son voluntarios, en que tenemos conocimiento de causa, y hay actos malos con circunstancias que los pueden atenuar, el miedo, la violencia, la ignorancia, la inadvertencia, y otros factores psíquicos, políticos o sociales. O sea que para que un acto sea imputable debe ser previsible, y que exista manera de evitarlo. Por ejemplo quien en estado de ebriedad produce un accidente.

----La formación católica que nos da un hondo sentido de la responsabilidad, promueve nuestra libertad al constituirse nuestro actuar en algo propio de nuestra libertad, así es que somos libremente responsables, ello es la lucha de la vida interior.

----Nuestra libertad se vio “disminuida”, a causa de la caída de Adán y Eva. Dios nos había criado con libre albedrío desde el principio, pero el pecado de nuestros primeros padres nos sometió a la esclavitud del pecado, pero sin una total corrupción. Cristo en su venida nos rescató del pecado, al instituir los Sacramentos, nos da la oportunidad de contrarrestar en gran parte esa esclavitud que heredamos. Es así  es que gozamos de la libertad de los hijos de Dios y en su AMOR DIVINO por nosotros nos trae la Gracia que nos salva.

Esta Gracia de Cristo que recibimos sobre-abundantemente en el Sacramento eucarístico, es: su vida en nosotros y nos da la perfección de la libertad, el sentido de la verdad y del bien, capacitándonos para, en uso de nuestra voluntad rechazar los pecados como: la falta de pureza, el hedonismo, el latrocinio, el divorcio y los actos que atentan contra la vida de las personas: Aborto, eutanasia, eugenesia, fecundación artificial, etc.

De nuestras acciones decimos que son voluntarias cuando las consideramos libres. La libertad es una propiedad de nuestra facultad volitiva, lo que descarta por completo al determinismo. Este es teoría de Calvino y Lutero, ellos hablan de un destino o necesidad de fuerza ciega. Lo que nosotros afirmamos es el LIBRE ALBEDRÍO, que es acción indeterminada, o sea que el sujeto que la realiza podría haberse determinado de  otra manera.

Recordemos que la voluntad es ciega en lo moral, legal, etc. tiene que ser informada por la razón, solo con buena información de la razón podemos usar adecuadamente aquello que la voluntad nos señala como bien, pues puede ser que señale en su ceguera un mal que ve como bien. Ej. robar lo ajeno, privar de la vida a un nonato.

La actividad libre no surge de la casualidad, si así fuere no cabría la responsabilidad de nuestros actos, ni sería acto de bondad o de maldad, aquí lo que impera es la CASUÍSTICA (término equívoco) que aquí podemos considerar como: los casos en que nosotros mismos nos interrogamos en nuestra propia conciencia. En las decisiones importantes, que analizamos internamente, otros no pertenecen a la casuística por su intrascendencia, son   simplemente  actos de nuestra libertad en los que se carece de  mayor importancia. Ej. ensalada de frutas.

LIERTAD PSÍQUICA, aunque no siempre podamos auto-determinarnos es la capacidad de querer aunque no se logre lo pretendido. La libertad psíquica la vimos con el ejemplo de Sancho Panza. Somos libres de pensar, y modificamos nuestros pensamientos por libre auto-convicción. Se trata del libre albedrío.  El ser humano al madurar va mostrando más dominio sobre si mismo, y nuestra libertad psíquica crece conforme lo hace nuestro conocimiento.

LIBERTAD LEGAL, O MORAL,   (con varias variantes), libertinaje, y el ejercicio de la libertad responsable en general en todos nuestros actos consientes, (humanos) que caen dentro del área que juzga la moral. (Responsabilidad).  Siendo el libertinaje, el hacer inconscientemente o conscientemente actos contra la moral, la ley justa, la pureza, y en general invadiendo la libertad de los demás. (esto es propio de las conciencias laxas). Ejemplo de responsabilidades tomadas con la libertad moral: el casado(a), no tiene libertad de engañar a su cónyuge, sin embargo por su libertad psíquica lo hace. Es esa disyuntiva de, puedo pero no debo, vemos a la libertad legal Vs. la psíquica. Abundan los ejemplos, quien se gasta la colegiatura de sus hijos en una farra. Escogemos lo que consideramos que es un bien natural pero es un mal sobrenatural. Nuestra libertad siempre está condicionada, nunca puede ser frívola, ni en lo profesional, ni doctrinal ni religioso.

LIBERTAD DE MOVIMIENTO, Nadie en su sano juicio piensa que, por Ej. las leyes de tránsito nos quitan la libertad, ej. las guardas y señales de las autopistas. El tránsito de aquí para allá y de allá para acá. Los límites que señalan son de elección positiva, no de represión. Es lo que podemos llamar limitación positiva, porque se enfoca a un bien generalizado. Si se establecen retenes en las carreteras, estos pueden ser, si aumentan la seguridad en contra del crimen, elección positiva, y no restringen nuestra libertad. Conviene no confundir REPRESIÓN con ELECCIÓN POSITIVA.

Además no podemos actuar por los instintos solos, como las bestias, seríamos sus esclavos, Dios nos da las armas necesarias para dominar nuestras pasiones y malas inclinaciones, están en nuestra conciencia, de allí la importancia de la formación cristiana, a lo que llamamos buena educación, que es el tener buenas maneras. Conviene pensar en esto y sus ventajas, son muy útiles en por ej.: política del buen vecino, discusiones por opiniones diferentes en política, y un sin número de situaciones civiles. En otras palabras, no somos libres de insultar, o descalificar por pasión, es mejor ejercer la libertad de expresarse con civilidad. 

Terminemos recordando una frase de San Agustín, que dice: recuerda que Dios que te creó sin ti, no te salvará sin ti, y con una invocación a María Santísima, nuestra madre del cielo: “Señora ayúdame a usar bien de mi libertad”.