martes, 25 de abril de 2023

ALGO SOBRE LA REFORA DE LA CURIA ROMANA. PRAEDICATE EVANGELIUM

  ALGO SOBRE LA   REFORMA DE LA CURIA ROMANA. PRAEDICATE EVANGELIUM.

Siendo el principal objetivo de la Iglesia que nos fundó Jesucristo la salvación de todas las almas y al ser su Divina Revelación, la que está contenida en su Evangelio y Tradición, el Papa Francisco ha emprendido, siguiendo la solicitud que desde antes de su elección, ha venido siendo sugerencia, de las Congregaciones Generales, por su importante necesidad. Con la intención de  mejorar las cuestiones susceptibles de ello, para que la difusión evangélica sea mayor y mejor en esta difícil época en la que hace tanta falta la verdadera fe cristiana, una serie de acciones de mucha importancia para continuar este camino sinodal. Por ello es que  nuestra oración se hace necesaria, obligada y devota. Es la ayuda que los laicos miembros de la Iglesia podemos y debemos aportar, muchos  aparte de sus oraciones colaboran con importantes trabajos relacionados.

Sobre la Curia Romana el Papa Francisco ha promulgado la Constitución Apostólica PREDICATE EVANGELIUM. Ésta por supuesto está en línea con los actos de Jesucristo, que cuando  les mandó evangelizar, al recibir los apóstoles la encomienda de Nuestro Señor se refirió claramente de llevar a todas partes sus enseñanzas, hasta el último rincón de la tierra, antes de su Ascension: “”Jesús se acercó y les dijo: Se me ha dado toda autoridad en el cielo y en la tierra. Id pues, y haced discípulos de todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, enseñándoles a guardar todo lo que os he mandado; y he aquí, yo estaré con vosotros siempre, hasta el fin de los tiempos “” Mt. 28 18-20. mandato que se ha estado llevando a cabo, pero es tarea que nunca acabará, pues una cosa es llegar pero después viene la labor interminable, pero que gracias a las vocaciones que el Señor manda según su corazón, con alegría cristiana se cumplen, los discípulos de Jesucristo estamos llamados a trabajar por y con la Iglesia allí donde el Señor nos ha puesto para ser LUZ DEL MUNDO, (Mt 5,14), en estos tiempos el hombre está muy necesitado de esta Luz, siempre ha sido así, pero hoy la tarea es mastodóntica, porque somos muchos, decidámonos a iniciar o reforzar, nuestra actividad pastoral, siempre habrá resultados. Últimamente ha habido movimientos de reforma de la Curia Romana, independientemente del siglo XVI. En 1908 se promulgó la Constitución Apostólica SAPIENTI CONSILIO, de Pio X, en 1967 la Constitución Apostólica,  REGIMINI ECCLESIAE UNIVERSAE, de Pablo VI. Juan Pablo II promulgó la C.A. PASTOR BONUS, lo que nos permite ver que el interés no cede ni cederá nunca. Todas han dado avances de importancia, es en continuación de ésta que el Papa Francisco ha promulgado la Constitución Apostólica PRAEDICATE EVANGELIUM.

Siempre está la Iglesia buscando los caminos más apropiados para el servicio evangélico a los hombres, el más grande ejemplo lo tenemos en los Apóstoles, que nos dejaron, al realizar su misión, las pautas a seguir, cumplieron dentro de la jerarquía, cuerpo unido en disímbolos lugares, lo que a nosotros corresponde es mantenernos unidos en tanto comunidad global y trabajar armónicamente ya sea con nuestra parroquia, directamente bajo la dirección de nuestro obispo, en alguna de las instancias que sirven a la Iglesia, como la Iglesia quiere ser servida, siempre unidos jerárquicamente. El directivo que nos corresponde y al que correspondemos nos hará llegar, lugar, manera y campo de trabajo que nos permite ser creativos y tener iniciativas. El ejemplo es precisamente el de la Curia que trabaja para el Papa, y este para la Curia, que está al servicio de los obispos y de otras importantes actividades como los congresos regionales y continentales, los obispos tienen responsabilidades que de acuerdo a las necesidades de sus diócesis varían, algunas tienen gran pobreza, otras están sufriendo los desastres de las guerras, otras necesitan de resolver problemas propios de las relaciones con gobiernos enemigos del catolicismo. Pero por encima de todos los casos la ayuda está especialmente en el aspecto espiritual, que necesita de muy variadas soluciones, por ejemplo en formación de sacerdotes, en la operación de los seminarios, su profesorado, formación de los propios obispos, etc.

Todo cristiano por el hecho de estar bautizado tiene un doble papel dentro de la Iglesia, es por un lado discípulo y por otro misionero, siempre ha sido así, así lo quiso Dios Padre, y así nos lo enseñó Jesucristo. Dentro de otros aspectos de la Reforma actual se está dando más espacio y más responsabilidad a los laicos, incluso en el gobierno de dicasterios, hay aspectos como el familiar, el económico, y otros, que los signos de los tiempos han hecho pensar en lo conveniente que esto debe resultar. La ayuda  y fusión entre dicasterios es otro aspecto del trabajo interno. Es importante entender que la reforma de la Curia no es una reforma de la Iglesia, y mucho menos de su doctrina. Es que la Iglesia siempre está a la escucha de los cambios de los tiempos, de las nuevas oportunidades de comunicación que las culturas modernas nos brindan, y por tanto de nuevas expectativas humanas, siempre con el interés primario de cumplir con el objetivo misional.

La Curia está conformada por una Secretaría de Estado, varios dicasterios y otros organismos. Cada uno tiene un director (o prefecto), varios secretarios y sub-secretarios, los cuales son elegidos de diferentes lugares del mundo, exprofeso para darle más universalidad, se eligen entre clérigos y seglares de quienes se exige: amplia experiencia en el área, el que sean de vida virtuosa y apostólica, que sus títulos se confirmen adecuadamente, y que estén dispuestos y deseosos de ejercer el puesto, y la misión que conlleva. Para nosotros por interés tan directo hay unos dicasterios que nos son más cercanos como lo son los que se ocupan de la familia y vida, de los laicos, de la comunicación, de la evangelización, del desarrollo humano, ya que existen otros más especializados como el de los textos legislativos o los que se ocupan de las finanzas de la Santa Sede.

Concluyamos que en atención al mandato del Papa Francisco de llevar la Iglesia a la calle, y el Praedicate Evangelium en su carácter pastoral, en el que nos anima a todos los fieles a llevar a cabo actividades particulares, nos propongamos acercar a nuestra Iglesia, a sus Sacramentos y conocimiento de su Doctrina, con el auxilio del Espíritu Santo, allí donde nos sea factible.

Jorge Casas y Sánchez.                                         

viernes, 14 de abril de 2023

EL REINO DE DIOS EN LA TIERRA

 ENTRADA    127   EL REINO DE DIOS, AQUÍ EN LA TIERRA.

Lo que el pueblo judío que Dios había escogido para los sucesos que estamos por mencionar esperaba en cuanto al Mesías que debía de venir, EN SU INTERPRETACIÓN de las Escrituras y la Tradición, a un poderoso personaje que fuera un gran rey, gran legislador de lo político, que formara un poderoso ejército, que se sacudiera el sometimiento a los romanos que padecían y que hiciera de su pueblo una nación reconocida, fuerte, autónoma en el concierto internacional.

La realidad de la DECISIÓN DIVINA es muy diferente, el plan de Dios es el acontecimiento más grande que este planeta en su conjunto nunca hubiera podido imaginar, y su realización no necesitaba de ejércitos poderosos, personajes de talla política internacional, legislaciones sorprendentes, ni cosa parecida. La Decisión Divina fue el envío de su Hijo, la Segunda Persona de la Santísima Trinidad, EL LOGOS, que vino de la manera más humilde, y armado tan solo de su palabra a ese pueblo pobre, inculto de pastores y agricultores al que el propio Dios había guiado y concedido tierras prometidas de antemano a sus generaciones anteriores, y a quienes había ayudado a poseerlas, venciendo a sus previos ocupantes.

El REINO QUE ETABLECE  El CREADOR, es milenario y no fenecerá sino hasta el fin de los tiempos, los más poderosos imperios y sobresalientes naciones son conquistadas  con la sola palabra, gozarán de sus enseñanzas novedosas, sus valores humanos que se harán tradicionales, contarán con una moral nueva cuya aceptación se generaliza, abarcará con el tiempo todos los rincones de la tierra. Ningún otro período de la historia humana tendrá sus dimensiones, ante estas palidecen la Grecia Clásica, el Imperio Greco-Romano, el Siglo de las Luces, el Renacimiento, etc. es el período de la mayor belleza, la salida de las tinieblas a la esplendorosa luz de la verdad y del valor del hombre, criatura ahora considerada su hechura a imagen y semejanza de la DIVINIDAD CREADORA.

Se vuelca sobre la humanidad un motivo nuevo, grandioso, la  vida humana tiene un valor, un sentido una finalidad de la mayor importancia posible, una Vida perdurable eterna que es continuación de la vida terrenal. El único Dios, el verdadero, el Creador, el que nos ama desde la eternidad ya no solo es conocido por el cerrado pueblo escogido, ahora los escogidos son todos los seres humanos, los que fueron, los que son y los que serán. El anuncio primero surgirá de un personaje que predica en el desierto y bautiza a los que se arrepienten de sus pecados, su amplia prédica se concentra en una frase, misteriosa y enorme: “ESTE ES EL CORDERO DE DIOS, EL QUE QUITA LOS PECADOS DEL MUNDO”.

En efecto a quien anuncia es a Dios encarnado, que será víctima, como el cordero lo era en los sacrificios de la época. Y quien escogerá a doce hombres a los que hará sus apóstoles, hombres con defectos, sin conocimientos de élite, en su mayoría pescadores rudos, pero once de ellos con fe en Él, le siguen, son formados personalmente por Él mismo, y lo verdaderamente fantástico es que sus actos moverán al mundo, una vez que su Maestro ha sido muerto por la ley romana a instancias de jerarcas judíos, ha resucitado para no morir jamás, y su ESPÍRITU PARÁCLITO CELESTIAL los acompañará en el resto de sus vidas apostólicas, y a la Iglesia que les deja fundada Jesucristo, la que permanecerá al cuidado de su ESPÍRITU SANTO hasta el fin de los tiempos.

Es así como la esperanza del pueblo judío que buscaba  la independencia de Palestina, solo en una parte de su pueblo lo entendió, y creyó que el Reino de Dios, estaba para siempre en esta tierra. Los arrogantes jerarcas de ese pueblo están en el basurero de la historia, mientras los humildes que si creyeron supieron buscar su eterna salvación en el Reino Perdurable, que contempla como pasan los imperios, terrenales para no sobrevivir. Sus promesas consisten en predicar la verdad, el perdón, el servicio a los demás, la justicia, la misericordia, el amor, la paz, y la más grande de todas LA GRACIA DE DIOS. Este reino REINA EN NUESTRAS ALMAS, cuando consideramos que Él es el camino, la verdad y la vida, cuando amamos a nuestro prójimo, y somos misericordiosos con los demás como Cristo lo es con nosotros.

Jordi Casas.

MORTIFICACIÓN CRISTIANA.

 ETRADA  128   MORTIFICACIÓN CRISTIANA.

 

Lo primero que nos planteamos es que en la religión cristiana, no hay masoquismo, y por supuesto no encontramos en el dolor o en las abstenciones un placer especial.

 

En nuestra religión el ejemplo del sacrificio, lo vemos siempre en la vida de Jesús,  Él mismo nos enseña que debemos de tomar nuestra cruz de cada día, por lo que nos conviene meditar sobre lo que esto tiene como significado, y encontramos que continuamente nos enfrentamos a contrariedades en la vida diaria, como escuchar a personas que no nos comunican cuestiones agradables, combatir nuestro cansancio, SER PUNTUALES, terminar cosas arduas de trabajo o quehaceres, el concentrarnos, por ejemplo en el estudio, la investigación, el poner atención en la Santa Misa, aguantar a los hijos o al cónyuge, a hermanos, que a veces son impertinentes, o compañeros de trabajo, vecinos exigentes que se quejan de una ramita de nuestra casa que se les pasa a la suya,  el prescindir de algún dinero para donarlo a una causa buena, y de ayuda a los pobres o enfermos.

 

Estas y muchas otras más son las mortificaciones del cristiano, que tenemos que saber vivir con alegría, en especial porque se las ofrecemos al Señor por amor. He aquí la PARADOJA mortificación con alegría.

 

El Catecismo de la Iglesia Católica, nos enseña que la moral  exige el respeto a la vida corporal, pero no hace de ello un valor absoluto. Se opone a una concepción neo-pagana que tiende a promover el culto del cuerpo, lo que es distinto a la búsqueda de una buena condición física ya sea per se o porque nos ayuda a la mejor práctica de algún deporte. COMPLEMENTARIO A  LA AFICIÓN, A LA COMPETITIVIDAD AMATEUR, O EL DEPORTE COMO PROFESIÓN.  El idolatrar la perfección, el tener obsesión por la apariencia física es una irregularidad que ya los antiguos calificaron como NARCISISMO y la ciencia moderna lo llama TRASTORNO DISMÓRFICO CORPORAL lo que   es distinto a la búsqueda del éxito deportivo, o la obtención de una buena y saludable condición física. 

 Debemos saber conformarnos con las CONDICIONES QUE EL SEÑOR HA QUERIDO QUE SEAN CARACTERÍSTICAS NUESTRAS, pero no lo confundamos con la dejadez, siempre debemos de estar en lucha contra lo que tiende a ser un defecto físico, dentro de lo que las virtudes nos aconsejan, TEMPLANZA Y PRUDENCIA principalmente,  alejándonos de las adicciones y vicios que destruyen mente y cuerpo, el mejor regalo que hemos podido recibir del señor es nuestra alma espiritual, y el cuerpo que tenemos. Con estos conceptos debemos de tomar nota de que el tener un cuerpo sano, que fortalecido por las buenas costumbres alimentarias, el ejercicio metódico o la práctica de deportes, no solo es bueno, sino aconsejable. Lo tenemos que considerar como algo que realizamos en AGRADECIMIENTO AL CREADOR, que nos lo ha dado, y que mientras mejor cuidemos de él mejor cumplimos su voluntad.

 

Debemos de esforzarnos en la vida espiritual, amando al prójimo, obteniendo conocimientos, buenas costumbres, participando en la vida comunitaria, y en cuanto a la vida corporal, el hacer algunos sacrificios como el ayuno, sin que sea perjudicial a la salud, incluso al contrario, como prescindir del postre de vez en cuando, NOS BENEFICIA.

 

 La “santidad en la vida ordinaria” que predica el Opus Dei, hace que los sacrificios más importantes sean los propios de la vida ordinaria: sonreír cuando se está cansado, acompañar a una persona en un trayecto, no retrasar un trabajo aunque aparezca la desgana.

 

La Nueva Enciclopedia Católica,  define así el término ‘Mortificación’: “Freno deliberado a los impulsos naturales con el fin de ayudar a la persona a alcanzar la santidad, obedeciendo a la razón iluminada por la fe”.

Y San Josemaría le llama acertadamente:  ORACIÓN DE LOS SENTIDOS.

 

 

¿Por qué se hacen estas mortificaciones?  nos preguntamos:

La penitencia y la mortificación son una parte pequeña pero esencial de la vida cristiana. Jesucristo ayunó durante cuarenta días en preparación de su ministerio público. La mortificación nos ayuda a resistir nuestra tendencia natural a la comodidad personal, que tantas veces nos impide responder a la llamada cristiana a amar a Dios y a servir al prójimo por amor de Dios. Además, esas molestias voluntariamente aceptadas unen al cristiano con Jesucristo y con los sufrimientos que él voluntariamente aceptó para redimirnos del pecado.

 

 A la mortificación,  el papel que ésta juega en la vida de los miembros del Opus Dei es muy secundario. Lo primero, para cualquier católico,  es amar a Dios y al prójimo. En coherencia con su propósito de integrar la fe y la vida secular, el Opus Dei enfatiza los pequeños sacrificios, más que los grandes: seguir trabajando cuando uno está cansado, tratar de ser puntual, prescindir de algo que a uno le gusta en la comida o en la bebida,  no quejarse.

La conversión comienza en nuestro interior,  --la que se limita a apariencias externas no es verdadera conversión--.  Uno no se puede oponer al pecado  en cuanto ofensa a Dios,  sino con un acto verdaderamente bueno,  acto de virtud,  con el que se arrepiente de aquello con lo que ha contrariado la voluntad de Dios y busca activamente eliminar ese desarreglo con todas sus consecuencias. En eso consiste la virtud de la penitencia.

«La penitencia interior es una reorientación radical de toda la vida, un retorno, una conversión a Dios con todo nuestro corazón, una ruptura con el pecado, una aversión del mal, con repugnancia hacia las malas acciones que hemos cometido. Al mismo tiempo, comprende el deseo y la resolución de cambiar de vida con la esperanza de la misericordia divina y la confianza en la ayuda de su gracia» RECORDEMOS QUE SOLOS NO PODEMOS, PERO CON LA AYUDA DE JESUCRISTO LO PODEMOS TODO.

La penitencia no es una obra exclusivamente humana,  es primeramente una obra de la gracia de Dios que hace volver a él nuestros corazones: “Conviértenos, Señor, y nos convertiremos”. Dios es quien nos da la fuerza para comenzar de nuevo».

 (Catecismo, 1432).

La conversión (como acto de fe que es repetido de acuerdo a cada quien pocas o muchas veces) nace del corazón, pero no se queda encerrada en el interior del hombre, sino que fructifica en obras externas, poniendo en juego a la persona entera, cuerpo y alma. Entre ellas destacan, en primer lugar, las que están incluidas en la celebración de la Eucaristía y las del Sacramento de la Penitencia, que Jesucristo instituyó para que saliéramos victoriosos en la lucha contra el pecado.

Además, el cristiano tiene otras muchas formas de poner en práctica su deseo de conversión. «La Escritura y los antiguos Padres de la  Iglesia insisten sobre todo en tres formas: EL AYUNO, LA ORACIÓN Y LA LIMOSNA que expresan la conversión con relación a sí mismo, con relación a Dios y con relación a los demás» (Catecismo, 1434). A esas tres formas se reconducen, de un modo u otro, todas las obras que nos permiten rectificar el desorden del pecado.

Con el ayuno se entiende no sólo la renuncia moderada al gusto en los alimentos, sino también todo lo que supone exigir al cuerpo y no darle gusto con el fin de dedicarnos a lo que Dios nos pide para el bien de los demás y el propio. Como oración podemos entender toda aplicación de nuestras facultades espirituales –inteligencia, voluntad, memoria– a unirnos a nuestro Padre  en conversación familiar e íntima. Con relación a los demás, la limosna no es sólo dar dinero u otros bienes materiales a los necesitados, sino también otros tipos de donación: compartir el propio tiempo, cuidar a los enfermos, perdonar a los que nos han ofendido, corregir al que lo necesita para rectificar, dar consuelo a quien sufre, y otras muchas manifestaciones de entrega a los demás.

  Durante la  Cuaresma, cada viernes, en memoria de la muerte del Señor la práctica penitencial del ayuno y la abstinencia son un ejemplo de mortificación que agrada mucho a Dios, y que nos va recordando a lo largo de estos cuarenta días el que debamos de llegar bien preparados a los días santos.

 

Dando vuelta a la página, meditemos: Entre los actos del penitente, la contrición aparece en primer lugar. Es  una detestación del pecado cometido con la resolución de no volver a pecar. Es DOLOR EN NUESTRA ALMA.

 

 «La contrición llamada “imperfecta” (o “atrición”) es también un don de Dios, un impulso del Espíritu Santo. Nace de la consideración de la fealdad del pecado o del temor de la condenación eterna y de las demás penas con que es amenazado el pecador. ES DOLOR DE NUESTRA RAZÓN. Tal conmoción de la conciencia puede ser el comienzo de una evolución interior que culmina, bajo la acción de la gracia, en la ABSOLUCIÓN SACRAMENTAL.

 

En el Antiguo  Testamento  vemos, (como en otras religiones), las prácticas penitenciales estaban arraigadas en el pueblo de Israel. La oración, la limosna, el ayuno, la ceniza sobre la cabeza, el vestido de un tejido tosco y áspero, llamado vestido de saco, eran algunos de los muchos modos que tenían los israelitas de mostrar su deseo de reorientar la vida y convertirse a Dios. Hubo grandes mortificaciones, de pueblos enteros, con su monarca al frente. (ninivitas con la prédica de Jonás).

Jesús, que, como unánimemente señalan historiadores y estudiosos de la Escritura, centró el contenido de su predicación en el Reino de Dios, exige también la conversión como parte esencial del anuncio del Reino: «El tiempo se ha cumplido y el Reino de Dios está al llegar; convertíos y creed en el Evangelio» (Mc 1,15). La conversión, la penitencia, a la que Jesús llama significa el cambio profundo de corazón. Pero también significa cambiar la vida en coherencia con ese cambio de corazón y dar un fruto digno de penitencia. Es decir, hacer penitencia es algo auténtico y eficaz sólo si se traduce en actos y gestos. De hecho, Jesús quiso mostrar con su vida penitente que Reino de Dios y penitencia no se pueden separar. Practicó el ayuno (Mt 4,2), renunció a la comodidad de un lugar estable donde reposar, LAS ZORRAS TIENEN SUS MADRIGUERAS Y LAS AVES SUS NIDOS PERO EL HIJO DEL HOMBRE NO TIENE DONDE REPOSAR LA CABEZA (Mt 8,20), pasó noches enteras en oración (Lc, 6,12) y, sobre todo, entregó voluntariamente su vida en la cruz.

Los primeros discípulos de Jesús, al hilo de sus enseñanzas, entendieron que seguir a Cristo implicaba imitar sus actitudes. San Lucas es el evangelista que más subraya cómo el cristiano debe vivir como Cristo vivió y tomar su cruz cada día, como Jesús había pedido a sus discípulos: «Si alguno quiere venir detrás de mí, que se niegue a sí mismo, que tome su cruz cada día, y que me siga».

Mortificación en conformidad con la enseñanza de Jesús

De este modo, los primeros cristianos continuaron acudiendo al templo a rezar (Hch 3,1) y siguieron practicando las obras de penitencia, como por ejemplo el ayuno (Hch 13,2-3), si bien en conformidad con la enseñanza de Jesús: «Cuando ayunéis no os finjáis tristes como los hipócritas, que desfiguran su rostro para que los hombres noten que ayunan. En verdad os digo que ya recibieron su recompensa. Tú, en cambio, cuando ayunes, perfuma tu cabeza y lávate la cara, para que no adviertan los hombres que ayunas, sino tu Padre, que está en lo oculto; y tu Padre, que ve en lo oculto, te recompensará» (Mt 6,16-18).

Sin embargo, a la luz del valor de la muerte de Cristo en la cruz, por la que los hombres son redimidos de sus pecados, los cristianos entendieron que las prácticas penitenciales, sobre todo el ayuno, la oración y la limosna, y cualquier sufrimiento no sólo se ordenaban a la conversión sino que podían asociarse a la muerte de Jesús como medio de participar en el sacrificio de Cristo y corredimir con Él. Así se encuentra en los escritos de Pablo: «Completo en mi carne lo que falta a los sufrimientos de Cristo en beneficio de su cuerpo, que es la Iglesia» (Col 1,24) y así se sigue viviendo en la Iglesia.

Estamos en tiempos en los que ser católico tradicional es menos usual cada día. Por lo contrario vemos en el Sínodo alemán, que por lo visto recién terminó llegando a conclusiones totalmente fuera de la Doctrina Cristiana, pues admite como normal y no pecaminoso nada menos que el pecado de sacrilegio. Se trata de herejías. Lo que equivocadamente pretenden es tener menor pérdida de fieles, y de recuperar algunos que se han alejado por encontrar difícil el cumplir con lo tradicional de nuestra religión e irse por el camino fácil, haciéndose de la vista gorda de las verdades que Cristo predicó, reveló y enseñó. Buscan a los adictos a lo “ligth”, a lo que no obliga, a lo que no compromete, a lo que NO MORTIFICA en lo más mínimo, y por lo tanto no es cristiano.

Buscan:  -El no celibato en los sacerdotes.

               -La bendición de parejas homosexuales y de otras denominaciones.

                -El dar la comunión a personas en pecado mortal. Que es pecado                

                      De sacrilegio. Corintios 11 al 29.

                   

                    -Ordenación femenina, que Cristo nunca instituyó a pesar de haber interactuado con     

                      mujeres de gran santidad, su propia Madre, la Magdalena, y otras. Recordemos que

                      Los hombres no podemos parir, cada quien su papel, en esta vida.

 

Esta semana en que festejamos a san José, nos brinda la oportunidad de admirar en este santo varón la mortificación que fue destino de su vida, supo vivirlas por amor a Jesús y a la Virgen.

 

Jorge Casas y Sánchez.

lunes, 6 de marzo de 2023

EL LENGUAJE, LA MENTIRA Y LA VERDAD EN LOS MEDIOS MASIVOS DE COMUNICACIÓN

 EL  LENGUAJE, LA MENTIRA Y LA VERDAD EN LOS MEDIOS MASIVOS DE COMUNICACIÓN.

El octavo mandamiento de la ley de Dios, claramente nos manda NO MENTIRÁS lo que coloca a la mentira entre los posibles pecados graves, esto de acuerdo al tema y conducta del pecador, algunos ejemplos de mentira son: el doblez que viene a ser una forma de engañar, el fingimiento, la simulación y el disimulo, la malicia, la información torcida, etc.  Por otro lado la verdad nos proporción alegría espiritual, nos hace más audaces, desarrolla en nosotros el amor a  ella, colabora al Bien Común en tanto virtud moral con la grata influencia en otras virtudes como la justicia y el amor, es un derecho de la humanidad que se ejerce en forma constante para beneficio de todos, mientras sus opuestos, la mentira, el engaño, las chapuzas, las falsedades, los embustes en tanto contra-valores lo que llevan consigo es el desorden, el sufrimiento en otros, la falsa esperanza, la desilusión, y muchos males más. Los agravantes son en relación a la gravedad de la materia y de la persona que la emite, no es lo mismo que a la persona desagradable se le informe que no se dispone de tiempo para atenderle, cuando no es así, a que un gobernador falte a la verdad al informar a los ciudadanos sobre un asunto de importancia social, que puede afectar negativamente a muchos. Finalmente está la equivocación que es una forma de faltar a la verdad, esta puede ser por causa invencible o por dejadez, así que no expresa la realidad.  Aquí cabe aclarar que la persona veraz pude sostener un equívoco, lo que no la hace mentirosa, mentiroso es el que dice algo consciente de que lo que está expresando, no coincide con la verdad que conoce de ello.

Por ser el lenguaje imprescindible para le comunicación entre humanos, ya sean familiares, amigos, socios, profesores, alumnos, clientes, proveedores, gobernantes, gobernados, etc. o sea que es interpersonal y siendo principalmente hablado o escrito, puede tener una sola persona que se dirige a muchos  o  solo a  otra persona. Tenemos que decir que un condicionante que se debe de tener es el de la veracidad, o no se le puede llamar en toda la extensión de su significado “comunicación”.  El hombre expresa sus necesidades, sentimientos, alegrías, dolores, sufrimientos, o gozos, influye en los otros, enseña o aprende, transmite o recibe información, la comunicación directa de persona a persona es quizás lo más frecuente en el trato humano, al menos en la primera parte de su vida, hoy con las Redes Sociales esta tiende a disminuir en el cara a cara, aunque siga siendo inter-personal por medio de los Correos Electrónicos, el WhatsApp que es usado por miles de millones de personas  y que incluyen fotografías y videos, que expresan enormes cantidades de variadísimos temas,  esto resalta la importancia de expresar con la mayor seguridad posible la verdad. Y están las redes masivas de comunicación, hoy digital, electrónica. Antes,  en la historia del hombre,  la primera forma de comunicación social masiva fue la palabra escrita a partir de la invención de la imprenta y de la alfabetización consecuente. Conviene recordar que la bondad humana procedente del cristianismo escogió como primer libro a ser impreso, y por lo tanto a masificar la comunicación (toda proporción guardada) fue LA BIBLIA, que es la Palabra de Dios.

Estas Redes Sociales son una herramienta de la comunicación que por supuesto usa el lenguaje y que tiene dos aspectos que ya hemos comentado, uno vil, malévolo y otro positivamente constructivo. Nuevamente es el viejo enfrentamiento entre la buena moral que enaltece al hombre y el libertinaje que le envilece, perjudica, en especial a los niños y jóvenes.

Tradicionalmente la comunicación humana ha sido y es escrita y hablada, por lo que en la forma escrita somos capaces de conocer temas importantísimos que se trataron hace miles de años, y ahora con las técnicas nuevas podemos guardar, aún no sabemos si será por siglos, como sucede con las reimpresiones de libros sapienciales de la antigüedad, (ojalá), diálogos hablados que están grabados en videos. Esto es entre otros muchos indicativo de la excelencia, necesidad y maravilla de lo que es el lenguaje su comunicación de sabiduría aparte de la personal, aunque no todo lo escrito, o filmado, es bueno y constructivo, en especial cuando se trata de los enemigos del cristianismo que no llegan a comprender que es el amor, a Dios y por Él  a sus criaturas lo que solucionaría todos los problemas actuales de la humanidad. Dios ha querido enseñarnos esto personalmente y por ello nos mandó a su hijo que en medio de sufrimientos nos dejó las más grandes enseñanzas de amor humano. Estas enseñanzas se actualizan maravillosamente en la Iglesia Católica al interpretar con su MAGISTERIO, acordes a los signos de los tiempos, las nuevas situaciones humanas que con la invaluable asistencia del ESPÍRITU SANTO.

Hay mentiras superficiales que solo causan males menores y las hay graves que son perjudiciales para las personas en lo particular y para grandes sectores de la humanidad. Hoy día con la enorme difusión que logran los medios masivos,  debería todo aquel que ejerce una responsabilidad social y tiene comunicación en ellas no solo cuidar que su lenguaje sea de calidad y claro, sino que su contenido sea verídico y no solo tratar de manejar siempre la verdad sino asegurarse de que se está haciendo.   

Tratar de mantener una mentira política cuando se es un personaje con “público” es lo más deleznable y perjudicial, en cualquier entorno social,  en el que la mentira se ha convertido en una herramienta para lograr inconfesables ventajas  usando  los medios de comunicación,  su maldad se multiplica, él contexto en que se difunde la mentira a veces, no solo es enorme,  sino que convierte al emisor en desorientador malévolo. Y a sus receptores en masa mal informada, lo que perjudica grandemente al Bien Común.

Las más perjudiciales mentiras proceden de las ideologías malsanas, y las más grandes verdades proceden de la DIVINA REVELACIÓN Y SU INTERPRETACIÓN MAGISTERIAL. Tratemos, con la ayuda de Nuestra Madre del Cielo, de ser veraces en todos los aspectos de nuestra vida, y conocer las grandes verdades de la DIVINA REVELACIÓN.

Jorge Casas y Sánchez.

lunes, 27 de febrero de 2023

MEDITEMOS SOBRE LA FORMACIÓN HUMANA, APOSTOLADO.

 -  MEDITEMOS SOBRE FORMACIÓN HUMANA.  APOSTOLADO

Los diferentes niveles de la formación cristiana, como la lógica nos señala, van desde los primeros conocimientos, los que todo buen matrimonio enseña a sus pequeños vástagos; a signarse, a rezar las primeras oraciones a Nuestro Señor, a Nuestra Madre del Cielo, a nuestro Ángel de la Guarda, lo que se completará en su momento con la asistencia al Catecismo, donde la o el catequista infantil  nos enseña que hay un solo Dios, infinitamente perfecto y misericordioso, que nos ha creado, que nos quiere muchísimo, que envió a su hijo Jesucristo para salvarnos, perdonándonos del grave pecado que cometieron nuestros primeros padres, que somos criaturas del Señor, que estamos en esta vida, para: amar y servir, a Dios con todo nuestro corazón, con toda nuestra alma, y con todas nuestras fuerzas, que hay una vida después de esta vida terrenal, que es de una felicidad perfecta o que si no cumplimos con la voluntad de Dios está otra vida  de grandes sufrimientos.

Poco a poco iremos conociendo las grandes verdades de la Revelación y Tradición cristianas, se nos enseñará el Credo, los Mandamientos, se nos preparará para los Sacramentos. Lo que debería de suceder generación tras generación; sin embargo, lastimosamente llama la atención una frase que se está manejando mucho en estos días, y que pone los cabellos de punta, dice: LO QUE ANTES SABÍAN LOS NIÑOS, HOY LO IGNORAN LOS VIEJOS. ¿Que nos sugiere el  pensar esto?, que ya son varias las generaciones a las que se debe culpar de ello,  y que es gravísimo, porque aquellos niños que recibimos esas enseñanzas no las hemos sabido transmitir.

Es mucho muy urgente que la cristiandad recupere su gran capacidad de enseñanza llevándola a cabo, todos nos debemos de involucrar trabajando, dedicándose a catequizar, a hacer apostolado, es obligación de religiosos y de seglares, cada uno en el rol que le corresponde pues hace mucha falta y es necesario recuperar el terreno perdido  no solamente a nivel de párvulos, lo que es de vital importancia, sino con jóvenes, con adultos, inclusive con los viejos para recuperar lo que hemos perdido. En nuestro caso estamos hablando de CATEQUESIS ORGÁNICA PARA ADULTOS, que es la que busca otra iniciación, a la que podemos llamar “iniciación a la plenitud de la vida cristiana”. Por lo que en las ENTRADAS de “Descubrir Espiritualidad”  leemos, y debemos meditar lo leído; es recuerdo o enseñanza para los ya iniciados en la Doctrina Básica, que quieren ir aumentando y/o afinando sus conocimientos de nuestra religión; pero no vivamos tan solo para nosotros, pensemos en y actuemos por los demás. Siendo  misión pastoral el tratar una serie de elementos que están íntimamente relacionados con la Pastoral del Magisterio de la Iglesia, pretendiendo suscitar razonamientos y meditaciones que afirman nuestra fe y demás virtudes teologales y humanas, buscando obtener energías de LA IMITACIÓN DE JESUCRITO, de los Santos Evangelios, del Catecismo de la Doctrina Cristiana, de las publicaciones papales y de las Divinas Revelación y Tradición así como de las enseñanzas del Opus Dei, todo de la más pura Doctrina de Jesucristo, y sin olvidar las enseñanzas del Antiguo Testamento.

Cuando hablamos de la imitación de Jesucristo, lo primero que se nos viene a la mente es el siguiente  cuestionamiento: ¿Cómo es esto posible, si Él es Dios todopoderoso, Creador y Redentor nuestro? Y la respuesta es: tratar dentro de nuestras  capacidades humanas, con nuestro mejor esfuerzo de cumplir con la voluntad de Dios Padre, como lo hizo Él: “LAS PALABRAS QUE ME DISTE SE LAS HE DADO Y ELLOS LAS HAN RECIBIDO” Jn.17,8 , esto se complementa con la necesidad y conveniencia de rezar, de pedir que lo que realicemos en materia de apostolado sea posterior a la oración correspondiente. San Josemaría nos decía: Primero, oración; después expiación; en tercer lugar, muy en “tercer lugar”, acción y completaba, -la oración es omnipotente-. Apóstol viene de una locución griega que significa, enviado. Los doce Apóstoles de Jesucristo, a quienes Él escogió continuaron con sus enseñanzas el resto de sus vidas y lograron la más grande transformación espiritual, moral y religiosa que en este mundo se ha dado, quedando establecida en la humanidad según los lugares del globo con más o menos participación, misma que con la extraordinaria labor misionera que se distingue por catequizar fuera de su entorno, sigue convirtiendo almas llegando a lugares antes desconocedores de nuestra fe, y que continuará hasta el final de los tiempos. Hoy sigue habiendo apóstoles, como continuadores de la misión de anunciar el Reino de Dios por todo el mundo y de esto quiero comentar: todo aquel que ha encontrado el amor de Jesucristo, por este solo hecho, al atestiguarlo ya está cumpliendo con la misión apostólica en su mínima expresión. Es obligatorio, urgente, y necesario que vayamos más allá,  que tratemos, primero que nada con nuestro ejemplo y después con nuestras oraciones y acciones.

Todo apostolado debe comenzar con oración, esta es una enseñanza de Jesucristo que San Josemaría, un santo de nuestro tiempo, tomó mucho muy en cuenta al grado de convertirse en  gran maestro de la oración, nos enseña que lo primero es la oración, después la expiación y solo en tercer lugar, muy en tercer lugar la acción. Esta es una clarísima enseñanza de Jesucristo que oraba a Dios Padre: Mateo 14, 23-24   Mateo 6,7-13  

Lo peor que nos puede suceder es que no hagamos nada, no se trata de convertirnos en activistas, sino de saber aprovechar las oportunidades que la vida nos presenta para, en esos momentos atestiguar nuestras convicciones católicas ante los otros; y hacerlo con la intención de influir con nuestro ejemplo de buenos practicantes del cristianismo católico.

Cada uno nos debemos de manifestar con nuestra entrega en la que se colabora a la formación de los demás. El ejemplo que nos dejó Jesucristo es el que debemos de imitar, Él después de rezar a Dios Padre y de haber elegido a sus apóstoles los fue formando poco a poco para la enorme misión que les había destinado, ser apóstoles del mundo conocido. Les dio instrucciones con su Espíritu Santificador, y después de su Pasión, Muerte y Resurrección siguió enseñándoles a lo largo de los cuarenta días lo referente al Reino de Dios. La gran obra evangelizadora que llevan a cabo fue nada menos que la continuación de las enseñanzas de Jesucristo, y que durará hasta el fin del mundo, y esta será más rica con la colaboración de cada uno de nosotros.

El núcleo de su mensaje se puede sintetizar haciendo mención de lo siguiente: su oración sacerdotal a Dios Padre, a quien alaba y nos resume la vida a la cual está llamada la persona humana, en nuestra existencia, que es nada menos que la búsqueda de la Vida Eterna donde  conoceremos a Dios Padre a Jesucristo a quien nos envió y a su  Espíritu Santo Paráclito Celestial, que nos permite intuirle, conocerle parcialmente en esta vida, y recibir sus mociones, que de seguirlas, nos santifican. “Las palabras que me diste se las he dado, y ellos las han recibido:

Jn. 17,3.  Y afirma la siguiente maravilla de su propia vida “Yo ruego por ellos” Jn. 17, 9

Roguemos a Dios Padre y a la Santísima Virgen que nos sea posible involucrarnos de alguna manera positiva en la reafirmación de nuestra fe en nosotros y en otros.

JCS.

Tercera parte LA ENORME NECESIDAD DE LA EDUCACIÓN EN MÉXICO.

    Tercera parte.   LA ENORME NECESIDAD DE LA EDUCACIÓN.

Una de las conquistas personales del ser humano para la cual es indispensable educar es para que logren: SU LIBERTAD COMO CONQUISTA PERSONAL. El lograr un buen desarrollo de la libertad es resultado de la madurez, y se centra en la realización de lo decidido en el fuero interno personal. Para lograrla es necesario actuar después de reflexionar, y no darse por vencido a los primeros intentos. Como educadores a los padres les es conveniente no instalarse en la pura protesta, y sí lo es el esforzarse con constancia y superar los obstáculos. Debemos convencernos de que podemos influir modificando factores negativos y apoyarnos en los puntos fuertes. Esta lucha no es solo física; se trata de una capacidad de elección integral de la persona humana, que se apoya en conocimientos y destrezas que parten de la voluntad y  la iniciativa.

Para el logro de lo anterior las grandes ayudas son: la educación de la inteligencia y la voluntad. En una ocasión le oí a un hombre sabio decir: que el ser inteligente “”es ver la realidad y que ésta siempre es objetiva y verdadera””. Este es un tema que se puede abordar desde varios puntos de vista muy importantes. El primero es, que quien no es capaz de ver la realidad, quien no tiene bien puestos los pies en la tierra, es el que comete errores y estos pueden ser graves e incluso afectar a otros, muchos o pocos. Como la inteligencia necesita de ciertas capacidades como pensar en lo abstracto, no tangible y en lo concreto, siendo lo primero la capacidad de pensar en  cosas como el planear, el aprender de nuestra retroalimentación, el distinguir lo viable de lo imposible; y lo segundo es la capacidad de pensar en lo tangible, la capacidad de distinguir entre la realidad y las apariencias. En la vida tendrán nuestros hijos que tomar muchas decisiones y es la facultad del alma que llamamos razón y cuya inteligibilidad tratamos de cultivar en ellos la que les permitirá tomar decisiones que van desde lo bueno hasta lo privilegiado. Los centros educativos de los menores conocen muy bien cómo deben de educar la inteligencia de los chiquitines, y para ello usan infinidad de cosas como la plastilina, los lápices de colores, les enseñan a bailar con música y muchas cosas más, esto les estimula a educación en lo concreto. Esto es lo básico, la estructura es responsabilidad de los padres, aquí conviene distinguir entre la educación académica y la INTEGRAL. Esta solo parcialmente se obtiene fuera del hogar, es por tanto el lograr su integralidad, responsabilidad de los progenitores.

Veamos dos aspectos el abstracto y el concreto; en cuanto a la educación en lo abstracto, ésta solo hasta los once años aproximadamente se puede empezar a enseñar y consiste en que los hijos puedan evaluar las consecuencias de sus actos, como se trata de una búsqueda dentro de sí mismo, debemos ayudarles a que mentalmente construyan sus escenarios,  a modo que su pensamiento abstracto les ayude a “”viajar”” a situaciones y conclusiones, aquí es muy útil potenciar su capacidad creativa, en lugar de darles soluciones a sus escenarios, pero si guiarlos sobre todo con criterios cristianos.

La educación en lo concreto abarca, enseñanzas muy importantes que los padres no deben descuidar. A modo de ejemplo se pueden mencionar, la higiene, el vestirse adecuadamente, la disciplina en el cumplimiento de los encargos, las buenas maneras en la educación, social, y muchas más; siendo la importante sobre todas,  la educación en la Religión Católica. No se pueden descuidar la adecuada preparación catequética para los Sacramentos de la niñez: la Confesión, la Primera Comunión y la Confirmación.

Otro aspecto muy importante es el de la comunicación familiar, que prepara a la persona para la comunicación fuera del ámbito familiar, se puede generalizar en el sentido de que quien se comunica adecuadamente en la familia extensa, primos tíos, abuelos, la hará también en su ambiente escolar, en sus estudios superiores y en su vida social y profesional. Por lo que todas las acciones que los progenitores lleven a cabo para fomentarla rendirán buenos resultados. Aquí se pueden presentar problemas en los menores que muestran timidez, introversión, e inclusive trastorno de la personalidad, al grado que habrá casos que conviene tratar con una o un buen doctor  profesional de la psiquiatría infantil.

El EJEMPLO en la educación de la persona humana en todas sus edades, siempre será el mejor método de enseñanza. Dentro de la vida familiar las relaciones entre los cónyuges son de tal importancia educativa que nada se le puede comparar, al ser el matrimonio el fundamento de la familia, este debe de manera permanente apoyarse mutuamente, los pequeños viven viendo a sus progenitores y aprendiendo de ellos, si ven un amor mutuo, respeto, colaboración, les oyen conversar, actuar, decidir, respetar sus libertades personales, tener sentido del humor, no solo esto les hará más felices sino que también mejorará las relaciones hijos-padres, les forjará sentimientos valiosísimos que tratarán de imitar. Las buenas relaciones entre padres e hijos tienen varios ingredientes aparte del amor que es el principal e indispensable, deben ser justos, en ocasiones exigentes, comprensivos y firmes, son muchas las características del trato entre las generaciones, es necesaria la comprensión y aceptación de que los entornos en que a cada uno le ha tocado vivir, donde Dios nos ha querido tener, y es en estos que tenemos que rendir nuestro mejor resultado.

En toda asociación humana se presentan conflictos, dado que como se dice “cada cabeza es un mundo” la familia no está blindada en contra de las contradicciones, lo que está es preparada, diseñada para encontrar las soluciones y sobre todo para que ls soluciones que se encuentren no dejen malos resentimientos. En estos casos hay consejos que vienen a ser útiles, doy algunos a continuación:

                Obrar con calma ante el conflicto.

                No interrumpirse, escuchar al otro u otros.

                Tratar de entender el punto de vista del otro(s).

                Exponer con calma y claridad nuestro razonamiento.

                Buscar la solución más justa y adecuada en tanto progenitor.

tradiciones, con la oración, siempre antes de la actuación, contaremos con la mejor ayuda posible.

JCS

miércoles, 15 de febrero de 2023

segunda parte , LA ENORME NECESIDAD DE LA EDUCACIÓN.

  Segunda parte de LA ENORME NECESIDAD DE LA EDUCACIÓN EN MÉXICO.

En la primera parte, (ENTRADA 120.-) he tratado de mostrar las pésimas consecuencias que en parte de la ciudadanía ha producido la nula o pobre educación pública que recibe el pueblo mexicano. Una educación carente de los valores tradicionales y con contenidos que siembran el odio entre las clases y la falta de una moralidad necesarísima. Necesitamos superar esta situación, planteándonos lo que una verdadera educación pública debe de contener, debe de ser. El primer problema que se presenta es el de la cantidad de información que está contenida en el Internet a la cual tienen acceso los profesores y los alumnos, y por tratarse estos de personas más familiarizados con la tecnología digital, es posible que en infinidad de casos sea mejor la accesibilidad del alumno que la  del profesor. Este asunto contiene muchos aspectos que aún no se han solucionado y no se avizora la solución, ya que será muy difícil que la totalidad de los alumnos acepten realizar esfuerzos por practicar por ejemplo, operaciones aritméticas “a mano” ya que no le encuentran sentido al contar con sus teléfonos inteligentes.

Pero hay problemas quizás más difíciles que los académicos, para los que se necesitan profesores mejor preparados (generalidad para solucionar y sin embargo más urgentes, como lo son los que se refieren a la formación humanística. Doy unos ejemplos:

                A.-Desarrollo de una normativa familiar.

                B.-Organizaciones que favorezcan la convivencia: social, cultivo de la amistad,

                    Y la participación adecuada. Iniciativas de índole profesional, social, etc.

                C.-Autonomía en el trabajo.

                D.-Vivienda adecuada.

                E.-Empleo del tiempo libre.

                F.- Control personal contra las adicciones.

 Solo podrán ser tratados a modo de ejemplo algunos de los comentarios:

 A.- El Centro Educativo debe de ser continuidad de la vida del hogar, si hay contradicciones entre lo que los padres y los docentes enseñan, sobre todo en la Educación Básica, se le crea un problema al alumno. Un ejemplo es la educación sexual, dado que la profesora o el profesor hablarán de ello con sus propios criterios personales. Este problema de haber llegado a dejar este delicado tema a la institución educativa es culpa de nosotros los padres de familia ya  que antes se consideraba tabú el ser tratado dentro del seno familiar. Es hora de que los padres retomemos el tema y nos preparemos para tratarlo adecuada y cristianamente y se excluya de la escuela de esta materia.

B.- Los padres deben dar ejemplos de participación social con los demás, el mejor ejemplo que se me ocurre es el de colaborar, no solo con su presencia, sino con sus comentarios y aceptación de comisiones en las juntas de padres de familia de los centros educativos donde sus hijos concurren en cuanto a las amistades de sus hijos, mientras son pequeñines es conveniente ayudarles a que se relacionen facilitando lo necesario, muy conveniente es aceptar y realizar invitaciones y festejos. Ello es de gran utilidad en el aspecto formativo de su vida social. Hay organizaciones parroquiales y otras de instancias católicas que organizan, quermeses, posadas, etc. que son oportunidades excelentes para los críos y para los progenitores. Ya vendrán tiempos en los que en uso de su libertad escogerán sus propias amistades, y si tienen una buena preparación estas serán las adecuadas.              

C.-  La autonomía en el trabajo es un tema tan amplio como las oportunidades del propio trabajo, ellos de acuerdo a la preparación que hayan recibido estarán muy influenciados en aquello que por vocación les atrae. En la vida profesional se encontrarán potencialidades “dormidas” que se irán descubriendo, y si en su formación se ha enseñado lo perjudicial del consumismo, el hedonismo, y las ventajas de la disciplina, la humildad, los principios de solidaridad y subsidiaridad así como la diligencia y por el contrario saben lo malo de la pereza, la desidia, la dejadez, el abandono, seguro que irán encontrando posibilidades de éxito, sabrán salir de sus problemas, serán buenos luchadores. En todo trabajo la capacidad de trabajar en equipo, la creatividad, la innovación, el desarrollo personal, la actitud y talante son parte de la autonomía personal. Son características de la autonomía, los padres en cada caso sabrán cómo preparar a sus hijos en este aspecto.

D.- El encontrar y adquirir la vivienda adecuada a lo largo de la existencia es uno de los requisitos de difícil realización y sin embargo de una satisfacción muy importante para la persona, en especial para la mujer que realiza uno de sus sueños más preciados al tener un hogar propio en el que su inclinación femenina tan importante sobre el decoro, la intimidad, la confianza, el sentimiento de ser reina en su pequeño feudo. Y para el hombre, es una satisfacción que no se compara a la que pudiera dar otra preciada posesión. Para ello es necesario escoger el camino que se considere más adecuado en el propio entorno. Este puede ser desde la decisión de solo vivir en lugares rentados, hasta el construir con cierta ayuda profesional hipotecas, y por supuesto albañiles, plomeros etc. su propia residencia, pasando por las muy buenas oportunidades de comprar un departamento, condominio o similar. Por la que se considera un tópico dentro de la educación familiar. La vida moderna está influyendo sobremanera en esta tradición, el tiempo nos dirá que será lo más apreciado para cada uno de los sexos.

E.- El empleo del tiempo y aquí me quiero referir más al formativo que se realiza familiarmente  debe de ser algo que enriquezca nuestra existencia y la de los hijos pequeños, por tanto nunca debe de ser un desperdicio, como el no hacer nada, o imitar a las lagartijas tan solo tomando el sol. San Josemaría nos enseñó  que el descanso es cambio de actividad. Es una gran verdad,  el dejar de lado nuestro trabajo profesional, en especial si es rutinario y desempeñarse en otra actividad nos proporciona un gran descanso, hay múltiples actividades enriquecedoras a ser realizadas primordialmente en el tiempo vacacional, las hay deportivas como el senderismo, o los campamentos (ahora en ciertos países se ha tornado peligroso debido a los robos y secuestros,  o  estorbos a los mercachifles de las drogas), para otros son las actividades intelectuales, o culturales, como visitas a museos, zoológicos, o lugares ecológicos; las actividades con desplazamiento son un atractivo para ciertas familias, cambiando de lugar de residencia temporal, o dentro del mismo que ocupamos usualmente, este aspecto con los cambios  drásticos es de importancia, muy popular para los citadinos por ejemplo es buscar sitios de playa y sus múltiples atractivos. Aquí se recomienda mucho el lugar a escoger sin malas influencias para menores y adultos; pues las hay verdaderamente vergonzantes por el nudismo que les gusta practicar a sus asiduos bañistas, lo que es impropio para adultos (induce al pecado) y muy dañino para los niños y jóvenes. Siempre será recomendable todo aquello que alimente nuestro espíritu y nuestra mente en uso del tiempo libre familiar. En general esto es siempre de tipo positivo.

F.-  Vivimos en un tiempo en que el consumismo tiene un inmerecido lugar de gran envergadura en nuestras costumbres, este al practicarlo es indudablemente una adicción y lo es con muchas otras perjudicial, unas mucho peores que otras, como ejemplos: el alcoholismo, el consumo de drogas, el acumular cosas y más cosas, el alimentarse en demasía o ser adicto a la alta cocina permanentemente, los hay “workhólicos”, o perseguidores de una figura atlética o curvilínea como finalidad, y un largo etcétera, sobre algunas de estas adicciones se puede comentar mucho, yo lo haré brevemente:

CONSUMISMO, no solo afecta nuestros bolsillos, sino que algo ilimitado, que nunca nos dejará satisfechos, basta con adquirir algo muy deseado no indispensable que una vez adquirido nos muestra otro hueco vacío que queremos llenar. No confundamos las ganas, la necesidad o conveniencia de adquirir algo que realmente nos ayuda en nuestra existencia con el capricho de adquirir algo para presumir. La presunción es un vicio contrario a la humildad.

ALCOHOLISMO, hay límites muy claros entre lo que es tomarse unas copitas en una celebración, emborracharse estúpidamente, beber consuetudinariamente un poco,  depender del alcohol para huir de depresiones, infelicidad, o ser simplemente dependiente o vicioso por debilidad mental o complejo de inferioridad, problema psicológico, o escoger vinos y licores adecuados para enriquecer una buena comida. Debemos de tomar conciencia de cuales son entre estos y otros ejemplos los que se pueden calificar de sanos y los son de malsana adicción.

DROGADICCIÓN, no me cabe duda de que quien es adicto a las drogas padece de infelicidad o algún tipo de desequilibrio mental. El consumo de drogas es muy perjudicial para las neuronas y otros sistemas físicos del ser humano, y no resuelve nada; en ocasiones se empieza el consumo en pequeñas cantidades con objeto lúdico, pero se va aumentando este hasta que físicamente se es dependiente y no se cuenta con la virtud de la fortaleza para salir airoso. Siempre se termina mal a pesar de que hay tratamientos e instituciones que se dedican a tratar y resolver estos problemas.

WORKHOLICOS, el peor resultado que esta adicción produce es la disminución en las relaciones familiares, siendo que estas son de una importancia que no se puede comparar con nada, porque resulta en poca práctica del cariño entrañable que solo con el trato personal se obtiene y que se debe cultivar en el seno familiar, en un mal ejemplo o ausencia de este con los pequeños y jóvenes. Está bien que se sea trabajador, muy trabajador pero hay que poner límites de horario para ejercer lo dicho y además están las actividades que corresponden al espíritu. No está bien dejar de ir a Misa o no hacer oración, meditar, o compartir tiempo de calidad con la familia en actividades conjuntas cambiándolo por afanes económicos. La vida es un proceso de superación en muchos sentidos y para lograrlo tenemos que establecer una lucha interior y superar aquello que no ayude a conseguir superarnos en todos los aspectos, nunca se  repetirá lo suficiente el valor de la educación con el ejemplo, y es mucho mejor unos padres que juntos oyen Misa los domingos dando un ejemplo maravilloso, que una ausencia que a lo mejor les sirva para fomentar el consumismo, la afición por vestirse con ropas de “marcas” -porque papá gana mucho-, o fomenta el defecto de la presunción por ir en auto nuevo y muy sofisticado.

Fin de la segunda parte, sigue la tercera.

JCS.