J Kennedy en su alocución de toma de la presidencia de los EEUU. dijo una frase muy importante y que ha trascendido hasta nuestros días y seguirá siendo citada, y puesta como ejemplo, y en muchos casos seguida, ejecutada, lo que Kennedy dijo fue: No mires que pueden los EEUU. hacer por ti, sino que puedes tú hacer por los EEUU. , sin duda que esto ha motivado no solo a muchos de los norteamericanos, sino a muchos ciudadanos buenos de otros países
Ante esta acertada y magistral frase tan profundamente humana y haciendo nosotros un verdadero acto de humildad, dada la inconmensurable diferencia que hay entre Dios y nosotros sus criaturas, podríamos preguntarnos si es razonable que nos dirijamos en nuestras meditaciones a Dios y le digamos, aparte de aquello que le pedimos, si hay algo que podamos hacer por ÉL. La respuesta que recibiríamos la podemos concebir de varias maneras, una sería: “NO TE HAS DADO AÚN CUENTA DE QUIEN SOY ¿VERDAD? QUE TODO LO PUEDO. ¿COMO TE ATREVES A OFRECERME TÚ, AYUDA? ¿QUE CREES QUE PUEDAS HACER POR MI? Pues no, no sería esa su respuesta, por el contrario, nos diría algo mas o menos así: QUERIDO HIJO MÍO, NO SOLO HAY MUCHO QUE PUEDAS HACER POR MI, SINO QUE ESPERO QUE LO HAGAS, Y MI HIJO EN SU EVANGELIO TE LO HA PEDIDO, MIRA, YO AMO A TODAS LAS CRIATURAS QUE HE HECHO Y MUCHAS DE ELLAS ESTÁN ALEJADAS DE MI, UNAS PORQUE ASÍ LO HAN DECIDIDO, HACIENDO USO DE LA LIBERTAD CON LA QUE LAS HE CREADO, Y OTRAS PORQUE NO ME CONOCEN AÚN. EN AMBOS CASOS YO ESPERO DE TI QUE TRATES DE ACERCARLAS A MI, QUE LES HABLES DE MI, QUE LES DES A CONOCER CUANTO LAS AMO, Y EN ESPECIAL QUE MANDÉ A MI HIJO A QUE SUFRIERA UNA PASIÓN DOLOROSÍSIMA, Y QUE DIERA SU VIDA PARA AYUDARLOS A SALVARSE. FUNDANDO SU IGLESIA Y DEJÁNDOLES SU DOCTRINA DE ACUERDO A MI VOLUNTAD, LOS SACREMENTOS A TRAVÉS DE LOS CUALES PUEDEN LOS BAUTIZADOS RECIBIR MI GRACIA EN FORMA SUPERABUNDANTE, MI HIJO, SU MADRE LA VIRGEN SANTÍSIMA Y SU PADRE ADOPTIVO, SAN JOSÉ VIVIERON EJEMPLARMENTE, PRECISAMENTE PARA DEJAR ESO, EL EJEMPLO
Por supuesto que Dios no quiere que la pasión y muerte redentora de su hijo resulte en vano, y nos ha dejado a nosotros la tarea de corredimir con su hijo Jesucristo, ÉL quiere que nos involucremos en ayudar a la tarea que encomendó a sus apóstoles y discípulos. Por lo tanto no dudes en ofrecer tus servicios a Dios, siendo un fiel testigo de ÉL, dando a conocer la doctrina cristiana a cuantos puedas mediante un plan de acción apostólica, preparando tu propia formación antes que nada, para estar en la capacidad adecuada. Nuestra fe debe de ser operativa en especial en el sentido de compartirla, enseñarla, introducir en ella a los menores y también a los alejados Y VIVIRLA DE ACUERDO A LOS DESEOS DE DIOS, Es así como nos hacemos verdaderos cristianos, continuando la misión que nuestro Señor Jesucristo inició y para continuarla contamos con las especialísimas ayudas del ESPÍRITU SANTO y de la SANTÍSIMA VIRGEN.
Jorge Casas y Sánchez.
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