Sacramento de la confirmación.
Son tres los Sacramentos de la:
INICIACIÓN CRISTIANA, el Bautismo, la Eucaristía y la Confirmación. La
Confirmación es un Sacramento muy importante como todos los demás, que nos une
mas a la cristiandad, en su Iglesia, nos enriquece en cuanto a la gracia del
Espíritu Santo y nos autentifica como testigos de Nuestro Señor Jesucristo,
quien en diferentes oportunidades nos
habla de que su Espíritu vendrá sobre nosotros. Esta “venida” del Espíritu
Santo es una forma de reafirmar de allí el nombre del Sacramento, nos confirma
algo que ya tenemos. Toda la Revelación Divina que los hombres hemos recibido
desde el Patriarca Abraham, y a través de los profetas, los reyes, los jueces, y del propio Jesucristo es obra de
su Espíritu Santo. Después de su resurrección vemos en: JUAN, 20,22, “dicho
esto sopló sobre ellos y les dijo: Recibid el Espíritu Santo; a quienes les
perdonéis…….. y la cumbre de la efusión
del Espíritu de Dios es en Pentecostés (Hechos, 2-1,4).
En la Iglesia de los primeros
tiempos, la ceremonia de la imposición de las manos pronto incluyó también la
unción con óleo perfumado, (crisma), actualmente, el rito, es mas rico en sus
signos, aunque es el mismo Sacramento de siempre. Generalmente se confirma a
las personas por el Obispo, para quién esta solemne ceremonia es parte
importante de su misión, y que tiene la frecuencia requerida por su diócesis.
Aunque en ocasiones se delega a los presbíteros, debido a necesidades
específicas.
Recordemos que la acción del
Espíritu Santo es permanente, y lo es a título personal, al actuar en cada uno
de nosotros con sus mociones, lo es para la Iglesia y por supuesto en forma muy
especial para su Magisterio encabezado por el Santo Padre, el Papa. Es debido a
esta permanente acción del Espíritu Santo que, al ser bautizados y lo recibimos
para permanecer el resto de nuestra vida abiertos a sus inspiraciones, y mociones, que debemos en forma reiterada
abrirnos a Él, la Confirmación es una ocasión muy señalada porque contiene la
aceptación, ahora consiente, (de allí que se confirme a los menores una vez que
ya hacen uso de su razón). En el Bautismo nuestros padrinos a título nuestro,
representándonos, han aceptado en nosotros la presencia del Espíritu Santo, en
la Confirmación, lo hacemos a título personal, ya que tenemos uso de razón.
El Papa nos dice entre otras cosas, sobre el
Sacramento de la Confirmación, que ratifica
la gracia bautismal, nos une mas fuertemente a Cristo y afianza nuestra
relación con la Iglesia, concediéndonos una fuerza especial para defender la fe
y confesar el nombre de Cristo, a estas grandes verdades podemos y debemos
añadir otros aspectos que nos dicta nuestra Doctrina Cristiana, mas aspectos
los vemos en los Dones del Espíritu Santo, por ejemplo en el Don de Sabiduría
que nos permite entender las Sagradas Escrituras, Él nos guía para que podamos
comunicar la fe de Jesucristo a otros, empezando por nuestros hijos desde que
son pequeñines, con nuestro ejemplo, la enseñanza de las oraciones y las
costumbres morales, muy en especial la Misa Dominical.
Ahora se están confirmando muchos
adultos, tanto jóvenes púberes como adultos jóvenes, y la Iglesia tiene un buen
cuidado de que se preparen adecuadamente, y aprovecha la oportunidad para que
sus padrinos o madrinas , también reciban la plática correspondiente, ya sea el
caso de un repaso, lo que no está por demás, o la adquisición correcta de lo
que concierne al Sacramento. El rito de la Iglesia es muy interesante y en este
se reciben varios mensajes, uno de ellos es general, para todos os que están
presentes, en especial los que se van a confirmar, sus padres y familiares
cercanos así como sus padrinos, los confirmandos tienen sus lugares asignados,
junto con sus padrinos, y hace su entrada solemne el obispo, puede haber una
bienvenida por parte del párroco del lugar, y comienza la ceremonia, acto
penitencial, himnos (El Gloria, Aleluya, por Ej.) se continúa con las Lecturas
y el Santo Evangelio, y si no son muchos los confirmandos se les menciona por su
nombre. Son llamados al frente y reciben el mensaje general, después el Sr,
obispo hace una homilía de las lecturas proclamadas. Una vez sucedido lo
anterior el oficiante explica la relación entre el Sacramento del Bautismo y el
de la Confirmación. Continúa el encendido de las velas tomando la luz del Cirio
Pascual, pide a los confirmandos la renuncia a Satanás, y les pide la
renovación de las promesas bautismales, y así se va acercando el momento de la
unción personal a cada confirmando, en la que cada uno recibe
personalmente otro mensaje del Obispo
Oficiante.
La Confirmación perfecciona la
gracia bautismal, pero no perdona los pecados, por lo que hay que acercarse al
Sacramento en estado de gracia, los confirmandos adquieren el carácter
indeleble, que se imprime en el alma, por lo que es un Sacramento que se recibe
solo una vez en la vida, para concluir el día de hoy solo añadiré que por la
obra del Espíritu Santo , la Confirmación nos enraiza mas profundamente, en la
filiación divina.
Preparó Jorge Casas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario